Scarabaeidae sp.
Insecto
Tanto los adultos como las larvas provocan daños. Las larvas se alimentan de las raíces y dañan las vainas. Los gusanos se alimentan de las raíces finas y nódulos. Las plantas afectadas quedan amarillentas y marchitas, y mueren en parches. En los anuales, el marchitamiento repentino es el síntoma más temprano. Las plantas atacadas por los escarabajos adultos pierden las hojas.
Pulverice una suspensión líquida de nematodos beneficiosos (Heterorhabditis spp.) a 1,5 mil millones de nematodos por hectárea contra las larvas en el suelo a principios de la temporada. Utilice el extracto de Solanum surattense como tratamiento para las semillas. Trate los granos con queroseno (un litro por 75 kg/semillas) antes de la siembra. Conserve los braconides, libélulas y tricogrammatides. Los bio-insecticidas a base de NPV y el hongo muscardine verde también pueden funcionar.
Opte siempre por un enfoque integrado con medidas preventivas junto con tratamientos biológicos, cuando esté disponibles. Al salir del suelo, los adultos se alimentan del follaje de ciertas plantas cercanas. La pulverización de estas plantas por la noche con un insecticida persistente reduce la población de adultos antes de que pongan huevos.
Los adultos son de color café oscuro y de unos 20 mm de largo y 8 mm de ancho. De tres a cuatro días después del inicio de la lluvia, emergen del suelo, vuelan distancias cortas y se alimentan de las plantas circundantes. Después de alimentarse, vuelven a entrar en el suelo para esconderse y poner sus huevos. La hembra pone 20-80 huevos blancos y redondeados individualmente a una profundidad de 5-8cm en el suelo. Las larvas son de color amarillo blanquecino, translúcidas y de unos 5 mm de largo. Las larvas crecidas son robustas con mandíbulas fuertes. Su cabeza es amarillenta y el cuerpo de color blanco es carnoso y adopte frecuentemente una forma de 'C'. Se alimentan de materia orgánica durante unas semanas y luego se alimentan de raicillas y vainas finas. Además del maní, las larvas blancas también se alimentan de las raíces de la caña de azúcar, chiles, sorgo, maíz, frijol rojo o mijo perlado.