Alternaria solani
Hongo
Los síntomas del tizón temprano se manifiestan en el follaje, el tallo y las frutas más viejos. Aparecen manchas de color gris a marrón en las hojas y crecen gradualmente de forma concéntrica alrededor de un centro claro, siguiendo el característico patrón de una diana (de tiro al blanco). Estas lesiones están rodeadas por un halo amarillo brillante. A medida que la enfermedad avanza, hojas enteras pueden desarrollar clorosis y desprenderse, lo que provoca una defoliación significativa. Cuando las hojas mueren y caen, las frutas se vuelven más vulnerables a sufrir quemaduras solares. En los tallos y las frutas aparece el mismo tipo de manchas con un centro claro. Lego las frutas comienzan a pudrirse y, a veces, se desprenden.
Los pequeños agricultores pueden tratar las plantas infectadas con piedra caliza de algas, una mezcla de leche descremada y agua (1: 1) o harina de roca. También es útil aplicar una solución de 3 cucharaditas de bicarbonato de sodio y emulsión de pescado disuelta en 4 litros de agua. También se obtienen buenos resultados al aplicar productos a base de Bacillus subtilis o fungicidas a base de cobre que estén registrados como orgánicos.
Opte siempre por un método integral de medidas preventivas con tratamientos biológicos, de ser posible. Existen numerosos fungicidas en el mercado para controlar el tizón temprano. Se pueden usar fungicidas a base de azoxistrobina, piraclostrobina, difenoconazol, boscalida, clorotalonil, fenamidona, maneb, mancozeb, trifloxistrobina y ziram, o combinaciones de estos. Se recomienda rotar los diferentes compuestos químicos. Aplique los tratamientos de manera oportuna, teniendo en cuenta las condiciones meteorológicas. Revise cuidadosamente el intervalo de precosecha en el que puede cosechar de forma segura después de aplicar estos productos.
Los síntomas son causados por el Alternaria solani, un hongo que sobrevive en los residuos de cultivos los infectados en el suelo o en hospederos alternos. Las semillas o plántulas adquiridas comercialmente también pueden estar contaminadas. Las hojas inferiores a menudo se infectan cuando entran en contacto con tierra contaminada. El desarrollo de la enfermedad se ve favorecido cuando la temperatura es cálida (24 a 29 °C) y la humedad es elevada (90%). Cuando se registran periodos húmedos prolongados (o un clima que alterna entre seco y húmedo) se incrementa la producción de esporas, las cuales pueden propagarse por medio del viento, el agua de lluvia que salpica o la del riego por aspersión. Los tubérculos cosechados mientras están verdes o en condiciones húmedas son particularmente susceptibles a padecer infecciones. A menudo la enfermedad aparece después de un período de fuertes lluvias y es particularmente perjudicial en áreas tropicales y subtropicales.